En la Tabla III se presenta una síntesis del análisis de las Teorías Cognitivas. Para ellas, el cambio que experimenta la persona que aprende se asocia a procesos internos que no pueden observarse directamente. Los autores consideran el aprendizaje como una construcción del sujeto en interacción con el medio, que se logra a través de procesos internos. Las variables internas son importantes, asignándole al sujeto un papel activo. Las diferencias más significativas se centran en cómo son vistos el sujeto y el medio. Para Piaget la representación de la persona que aprende serían las operaciones lógicas, para los teóricos del procesamiento de la información es la memoria, para Freud el conciente y la memoria, la necesidad social para Vigotzki, los modelos mentales para Johnson- Laird, para Bruner la reconstrucción, etc.

prototipos de Rosch (1978) provee una teoría de formación de los conceptos en la que éstos serían la unidad fundamental de conocimiento y explica su formación por un proceso de abstracción.
Para Piaget (1978, 1987), la comprensión que un sujeto realiza del medio se hace a través de procesos de asimilación, acomodación y equilibración. Distingue la abstracción empírica que proporciona conocimiento sobre las características físicas de los objetos, de la abstracción reflexiva que tiene relación con los esquemas y operaciones y con su coordinación en estructuras. Básicamente sus investigaciones fueron realizadas sobre el aprendizaje de conceptos y propiedades físicas y operaciones lógico-matemáticas. Su
preocupación no estaba centrada en establecer condiciones sobre cómo enseñar, por lo que en su teoría no hay prescripciones instruccionales. No obstante, su trabajo ha sido quizás el que más ha influido en la enseñanza formal inicial. La idea central es la del sujeto como operador de la realidad que experimenta y sobre la que realiza abstracciones (Piaget, 1973). El docente debería preparar situaciones problemáticas como proyectos de acción y conocimientos graduados, que tengan en cuenta la etapa de desarrollo del alumno, la que le permite dar significado a lo nuevo que se le presenta y el objetivo debería estar puesto en promover el desarrollo de la inteligencia, lo que le permitiría comprender y conocer.
Para Bruner (1966) el aprendizaje está relacionado con la adquisición de medios para representar el mundo. Como Piaget, Bruner estudió inicialmente el desarrollo y no el aprendizaje, pero posteriormente su trabajo tuvo una fuerte implicancia educativa. Bruner (1988) ve al aprendizaje como acumulación de representaciones que se corresponden con el medio exterior, como una apropiación de los sistemas ya construidos por la humanidad, y la adquisición de los mismos para un uso permanente. Considera la mente como contexto interpersonal, social y cultural, que determina lo que una persona piensa. La posibilidad de aprender está en función de la posibilidad de apoderarse de sistemas categoriales construidos por la humanidad, y para ello, se debe aprender el modo de relacionamiento de las estructuras de cada disciplina. Como Piaget, establece la necesidad de un aprestamiento evolutivo para aprender estructuras, pero a diferencia de él, destaca la idea de Vigotzky de la incidencia de la interacción social en el desarrollo y resalta el rol del lenguaje. Bruner elabora principios para una teoría de instrucción, destacando la importancia de lograr la predisposición del alumno para aprender a través de la selección de experiencias de aprendizaje (Bruner, 1972). La estructura, ideas y relaciones fundamentales del contenido son de importancia central para la organización y secuenciación de la enseñanza. Propone una organización desde lo particular a lo general, pero la secuenciación óptima debería hacerse en
función del contenido específico, del nivel de desarrollo e individualidad del alumno. Contempla la necesidad de estímulos externos y la importancia de motivaciones internas del alumno, quien asume un papel activo. El docente debe presentar situaciones problemáticas para que aquel re-descubra relaciones. El poder explicativo de esta teoría está en el aprendizaje de conceptos y estrategias que le permiten al sujeto pensar sobre el medio. El contenido científico está considerado en las estructuras y métodos de la disciplina. Aunque para Ausubel la educación no es una tarea neutra, se lo ha incluido en este grupo y no en el último, pues la unidad de análisis de sus trabajos han sido los procesos cognitivos. En su psicología educativa (Ausubel et al, 1991), el aprendizaje significativo es una construcción de estructuras significativas a través de procesos de asimilación, diferenciación progresiva y reconciliación integradora. Debe existir una predisposición del sujeto para integrar la nueva información con sus ideas previas, esas ideas y estructuras previas deben ser adecuadas, y los nuevos contenidos deben ser relacionares de manera no arbitraria y no literal, a la estructura cognitiva. Para ello, el material a ser aprendido debe ser potencialmente significativo, de modo que el sujeto descubra en él alguna connotación que lo vincule con sus experiencias, otorgándole significado. La integración de las nuevas ideas a la estructura previa resulta en una estructura cognitiva modificada y enriquecida. Ausubel proporciona prescripciones formales para la enseñanza, enfatizando el rol del docente. Un aprendizaje significativo puede inducirse a través de una organización lógica de los contenidos y del uso de recursos que faciliten la relación entre la nueva información y el conocimiento previo. La teoría explica el aprendizaje receptivo de conceptos y de proposiciones, aprendizajes simples y mecánicos. El contenido científico tiene un rol fundamentalmente conceptual, donde la estructura lógica del mismo es importante, y un valor formativo al proveer modelos de pensamiento.
De acuerdo con Runelhart y Norman (1990) el conocimiento está representado en el sujeto. Una representación mental es una clase de modelo de aquello que
representa, que permite alcanzar conclusiones sobre las cosas que están siendo representadas (el medio ambiente) mirando sólo el mundo representante (los estados de la mente). Los esquemas o representaciones de Norman son estructuras organizadas de conceptos, con propiedades predictivas, compuestas de partes fijas y otras que deben ser llenadas por el sujeto. Norman no tiene interés en hacer prescripciones instruccionales sino en comprender los procesos cognitivos. No obstante impone que los modelos conceptuales a aprender sean aprendibles, funcionales y utilizables. El profesor debe ayudar al alumno a construir esquemas mentales adecuados. Esta teoría explica el aprendizaje de modelos conceptuales. El tipo de conocimiento, junto con el sujeto, determina el tipo de representación.
Para Johnson-Laird (1983 y 1990), las representaciones mentales que una persona construye pueden adoptar diferentes formatos: proposicional, modelo mental e imagen. El contenido a ser aprendido es todo aquello que puede ser percibido por el ser humano. Johnson-Laird establece a través de principios, las condiciones bajo las cuales un contenido puede integrar un modelo mental, que permiten distinguir conceptos no naturales, primitivos conceptuales y campos y operadores semánticos. La estructura percibida del contenido está presente en la estructura del modelo mental, mientras que el contenido está contenido en el modelo según éste es concebido por el sujeto. La unidad de conocimiento es el concepto. La teoría de los modelos mentales de Johnson-Laird explica el aprendizaje de palabras, conceptos, proposiciones y eventos del mundo físico. El contenido (y su estructura) está presente en el modelo mental de acuerdo a cómo el mismo es percibido.
http://www.educarchile.cl/Userfiles/P0001/File/TEORÍASAPR-ElContenido.pdf